Lejos de ser una excentricidad del pasado que se resiste a morir, la cultura política comunal representa una forma del hacer político boliviano tremendamente viva y dinámica: un modo de concebir y organizar la vida social, una dinámica de producción y reproducción de lo común que opera en distintos espacios y tiempos de la sociedad boliviana contemporánea, interpelando constantemente y, a veces, cuestionando abiertamente las formas dominantes de la política. En este libro, la autora se propone descifrar las gramáticas sociales que operan detrás de estas formas comunales de organización de la vida colectiva y pensar en las posibilidades de emancipación social inscritas en ellas. Lo hace de un modo muy peculiar: analizando las formas bajo las cuales las prácticas políticas comunitarias persisten, renovándose constantemente, en distintos espacios del mundo aymara boliviano contemporáneo (en el espacio rural y en la ciudad) y en diferentes momentos del acontecer de la vida política de estas comunidades indígenas (en los momentos de la vida cotidiana y en las rebeliones).