El fenómeno social analizado en este estudio es el proceso de corrupción que surge en un país que tiene una larga tradición de probidad pública, con todo un sistema de contrapesos y controles que son suprimidos totalmente durante dos décadas y cambian la naturaleza de la sociedad concluyendo que el poder absoluto corrompe absolutamente. Durante casi toda su historia independiente, de casi dos siglos, en Chile hubo bastante probidad pública, resultado de que las dos éticas en pugna, la conservadora y la liberal, sostenían estos principios. La manifestación más precisa de esta probidad es que hasta 1973 ningún presidente o gobernante se enriqueció con el poder. Esta historia se quiebra cuando se produce la dictadura de Pinochet, que tiene el poder absoluto y se enriquecen, él y sus seguidores, que se apoderan o venden a sí mismos las empresas y otros recursos públicos. Recuperada la democracia en 1990 los indicadores internacionales ubican a Chile como uno de los más probo del mundo, sin embargo, la herencia de corrupción heredada de la dictadura se ha mantenido oculta y reaparece en el siglo XXI y se transforma en uno de los problemas principales del país.