En la actualidad las organizaciones se enfrentan a un entorno cada vez más competitivo, inestable e impredecible; por lo que, para lograr que cualquier negocio triunfe, se hace necesario el empleo de la planeación estratégica como instrumento para la toma de decisiones. Cuba no se encuentra exenta de los impactos del entorno, las transformaciones en los últimos años se han encaminado a buscar vías para insertarse en un entorno global y nuevos mecanismos para fortalecer el sistema empresarial; cambiando normas de comportamiento vigentes por varios años. Es por ello que la empresa cubana ha tenido que desarrollarse con una búsqueda constante de métodos y herramientas que le permitan mayor flexibilidad y adaptación ante un mercado enteramente competitivo, siendo uno de ellos la Planeación Estratégica, como una vía para que las empresas logren establecer objetivos y líneas de acción en aras de perfeccionar su desempeño. En la actualidad este proceso debe ir enfocado a la solución de los retos que se le presentan, realizando una adecuada formulación de estrategias para contribuir a optimizar el uso de recursos y una mayor adaptabilidad a los nuevos escenarios.