En este libro se muestra cómo, en Twelfth Night or What you Will, una de las más famosas comedias de William Shakespeare, la realidad de los disfraces verbales utilizados en el texto dramático trasciende la ilusión de los disfraces físicos que aparecen en el texto espectacular. También, cómo el lenguaje se fusiona con la trama y se convierte en fondo, pues tanto palabras como silencios no solamente tienen significado sino que cumplen una función: conferir personalidad a cada personaje; lo que es especialmente significativo en lo que se refiere a los personajes femeninos que, en el teatro isabelino inglés, eran representados por actores vestidos de mujer. Esta convención, aun cuando aceptada en aquella época, fue manejada por Shakespeare magistralmente al hacer que uno de los personajes femeninos de Twelfth Night, la heroína, se disfrazara de paje. Así, el dramaturgo pudo realizar un doble juego con su público, el de ayer y el de hoy, pues la feminidad de ese hombre-mujer-hombre queda demostrada mediante las palabras que pronuncia, texto dramático, y no mediante la vestimenta que porta, texto espectacular.