La preocupación para elevar el nivel de aprendizaje de los estudiantes pasa, entre otros aspectos, por identificar sus estilos de aprendizaje y el enfoque que le dan a su aprender. En esta tarea se involucra el niño, sin saberlo; el padre de familia, siempre que se preocupe por hacer de su menor un estudiante con buenas calificaciones y con objetivos claros para con la educación; y el maestro que debe lidiar con estudiantes de diversos estilos. Saldaña (2010) señala que “En el proceso enseñanza-aprendizaje es primordial que el docente conozca los estilos de aprendizaje que poseen sus alumnos. Cada estudiante aprende de diferente manera, por lo que detectarlo sirve para poder crear ambientes de aprendizaje donde se utilicen estrategias didácticas que le permitan ir construyendo su aprendizaje y que propicien el aprender a aprender: A mayor emoción en el aprendizaje, mayor producción.” Los resultados mostrados por las pruebas internacionales en estudiantes de primaria, en el Perú, exigen a los docentes identificar los caminos más eficientes para lograr el aprender del estudiante. En esta tarea y preocupación se hallan los autores - Rómulo y Jeny.