La Neurociencia Afectiva aborda el estudio del sistema nervioso, la cognición, la conducta y sus bases emocionales a través de diversas aproximaciones moleculares, celulares, estructurales, funcionales, del desarrollo, computacionales, sociales y médicas. Los cognitivistas se ocuparon solo de algunas operaciones mentales pero poco saben acerca del cerebro y las emociones que nos otorgan subjetividad. La Neurociencia Afectiva al ocuparse de las emociones indaga en “la otra faz” del proceso cognitivo que no es solamente subjetivo puesto que las reacciones emocionales frente a condicionantes externos sigue cierta lógica objetiva: p. ej. todo el mundo se asusta ante una gran explosión. De modo que en la Neurología de la Conducta debemos ahondar, tanto en los clásicos dominios cognitivos de la Neuropsicología (atención, memoria, lenguaje, visuoespacialidad, funciones ejecutivas, etc.) como en las demandas emocionales, que son especialmente relevantes tanto para las bases instintivas del comportamiento como para la cognición social.