La determinación del gasto energético en reposo constituye un paso fundamental en el proceso del soporte nutricional de cualquier tipo de pacientes y, principalmente, de los pacientes más graves en los que tan perjudicial como la desnutrición puede ser un exceso en el aporte de nutrientes. El método más eficaz para determinar el gasto energético es la calorimetría indirecta respiratoria la cual también proporciona el cálculo del cociente respiratorio que indica los nutrientes que preferentemente oxida el sujeto y permite introducir modificaciones en el soporte nutricional. Además de un utillaje específico, su medición exige un completo conocimiento de las estrictas normas en que ha de realizarse para que sus resultados sean fiables. Directamente relacionadas con los métodos calorimétricos están las ecuaciones estimativas o predictivas del gasto energético. Las ecuaciones estimativas o predictivas se encuentran muy extendidas en la valoración cotidiana de pacientes y de grupos de población sana por su mayor facilidad de manejo no estando, sin embargo, exentas de controversias sobre su exactitud y aplicabilidad a cualquier tipo de pacientes.