El concepto de "gerencia del conocimiento" aparece al final del siglo pasado como una herramienta de eficiencia y eficacia para las organizaciones. Efectivamnente, lo más valioso que puede transmitir alguien es su experiencia y su conocimiento por medio de sus escritos, de su conversación, de su comportamiento en el trabajo o en otras actividades, lo cual sólo hará cuando libremente quiera transmitirlo. En este artículo se sostiene la teoría que para poder aprovechar el conocimiento humano lo primero que se debe hacer es valorar la dignidad de la persona, teniendo en cuenta, que si alguien se siente utilizado o presionado para transmitir lo que sabe dificilmente lo hará. Los miembros de una organización pueden tener conocimientos muy útiles, pero permanenceran en su intimidad o implícitos mientras no los comuniquen, por ende, no pueden ser aprovechados, sólo podrán ser útiles para la organización en la medida que los transmitan, convirtiéndose en explícitos. El aporte del conocimiento humano depende de la libertad de cada uno, por tanto, lo esencial es la buena dirección de las personas para posteriormente poder gerenciar sus conocimientos explícitos.