En este texto, se muestra que la forma en que está organizado el actual sistema de reglas del acento escrito presenta inconsistencias e incongruencias. Además, se argumenta que esta estructuración sería uno de los factores que dificultan el aprendizaje de este ámbito de la ortografía del español. La organización de las reglas de la tilde que se propone tiene como sustento la teoría de los sistemas complejos. Con este sustento, tras mostrar la fragilidad de la distinción entre reglas generales y reglas especiales, se propone una organización normativa distinta. A esta propuesta de estructuración se arriba luego de haber determinado que el sistema de reglas de la tilde, al ser artificial, no puede ser organizado al margen de la forma en que están organizadas las palabras en el sistema lingüístico del castellano. Esta propuesta tiene repercusiones beneficiosas para el aprendizaje y la enseñanza de la ortografía del castellano.