El término nefropatía cicatricial (NC) es el actual y correcto para definir la presencia de cicatrices renales; la nefropatía por reflujo, introducido en los años 70 sustituyó a la pielonefritis crónica atrófica, empleada para definir la presencia de cicatriz renal, con daño de carácter irreversible, que pretendía resaltar la patogénia del reflujo vesico-ureteral (RVU) en el daño renal; documentándose casos en ausencia de RVU, tener causas multifactoriales, pude ser congénito o adquirido; lo más correcto es NC. La gammagrafía renal estática DMSA-Tc99, es el método diagnóstico (“patrón oro”) para evidenciar lesiones agudas y cicatrices. En el libro exponemos la nefropatía cicatricial, un tema que nos interesó mucho; en nuestras consultas de nefrología pediátrica un 60% concurre por infecciones urinarias, hipercalciuria idiopática, y RVU, factores de riesgo para desarrollar cicatrices renales, que conducen a insuficiencia renal crónica con nesecidad de Diálisis en 20% de los casos, limita la calidad de vida de pacientes y genera alto costo a sistemas de salud. Dirigido a médicos de atención primaria, pediatras, nefrólogos, principales especialistas en prevenirla.