El profesorado en el escenario de la colaboración voluntaria que recibe de los demás integrantes de la comunidad educativa tiene, cuando menos, dos posibilidades para percibir ésta ayuda: a) Entenderla como un acto manipulador, individualista e instrumentalizador de los “colaboradores” para el profesorado, es decir, percibirla como una voluntariedad estratégica, o b) pensarla como una actividad sincera y comprometida, en donde coexisten objetivos y finalidades individuales y colectivas, es decir, percibir la ayuda como voluntariedad solidaria. En el desarrollo de éste trabajo se evidencian relaciones entre la percepción estratégica de la voluntariedad en la escuela y el contexto neoliberal, el que ha afectado desde los años ochenta a no pocos países de Latinoamérica. Por el contrario, la percepción solidaria de la voluntariedad se presenta como una superación de la percepción estratégica, siendo posible a través de propuestas y proyectos de intervención inclusivos, solidarios e igualitarios. Así vemos, que ante un escenario actual conducente a una apreciación escéptica de la ayuda es posible avanzar hacia la aprobación de la colaboración sincera a través del diálogo.