Desde los inicios de la investigación en vacunas antitumorales hemos asistido a un progresivo aumento de la eficacia en los diferentes modelos experimentales, indicando que era plausible su aplicación en la terapia del cáncer. Desafortunadamente, al llegar a la clínica se han encontrado grandes limitaciones, más en el campo terapéutico que en el preventivo, apuntando a la existencia de complejas barreras limitantes fuera de los modelos de laboratorio. Pensamos que el mejor conocimiento de los mecanismos desencadenados por estas vacunas nos permitirá sortear esas barreras. La consecución de este objetivo podría suponer importantes beneficios en los pacientes portadores de tumor. Este trabajo abarca modelos desde los liposomas, lipopoliplejos y proteínas tumorales hasta las vacunas antitumorales basadas en células modificadas genéticamente, mostrando desde el resultado totalmente eficaz en modelos preventivos de melanoma hasta la barrera encontrada en los modelos terapéuticos, donde se intenta comprender parte de los motivos responsables. Hemos querido reunir la experiencia previa con la más reciente, para conseguir añadir un paso más hacia el éxito de la vacunación terapéutica.